22 de diciembre de 2010

Sobre el pibe bueno, el histeriquito y la Cindor

Hay dos clases de tipos ahí, (ya sé que no tengo que generalizar, que clasificar está mal, pero este es mi blog y se me canta hacerlo, no me rompan las pelotas).

Primero, están
los histeriquitos. A los histeriquitos les gustan las histeriquitas. Después están los pibes buenos, a los pibes buenos les gustan las pibas buenas. Hasta ahí todo bien, salvo que las pibas buenas son boludas, porque les gustan los histeriquitos. Un círculo vicioso que no le viene bien a nadie en realidad, pero así es la vida generalmente, una mierda. Mas de una vez sucede que el histeriquito termina con el corazón roto y resentido (y por eso vive en una una histeria sin fin), la histeriquita se queda con el mejor pibe porque a la larga sabe que el histeriquito no le va a servir (muy inteligente), y la piba buena se queda sola o con tremendo hijo de puta. Pero hoy quiero hablar del pibe bueno.

El pibe bueno es tan pero tan bueno que cree que el tiempo le va a ayudar en su conquista. Perseverante y paciente, va tirando pistas de a poquito como para no asustar. En el proceso, se hacen amigos de la mina que les gusta. GRAVE ERROR, pibe bueno boludo! (y te lo pongo en rojo para que jamás vuelvas a hacerlo). Porque en la mayoría de los casos, cuando te convertís en un amigo para una mujer, no hay vuelta atrás, ni adelante, ni al costado. No, no le busques excusas, no hay puerta de atrás, no hay atajos, ni tiempos, ni gestos que valgan. SIEMPRE vas a ser un amigo, y solo un amigo. De hecho, si a la mina le gustaras, jamás te hubiera tomado de amigo de entrada. Cuando “NO” significa “NO” me pregunto cuán necio puedes ser, digo qué parte de “NO” no entendes? (Otra vez Dargelos musicalizándome).

Con esto no digo que la solución para todo pibe y piba buenos sea convertirse también en histeriquitos, porque si seguimos así con la histeria, la gente ya no va a cojer más y se va a extinguir la raza humana. O nos haremos todos gays, porque ellos la pasan mucho mejor, y no le dan tantas vueltas al asunto. Lo cual también lleva a la extinción de la raza humana. Pero dejemos de quejarnos, la cuestión es que hay muchísimos más pibes buenos que malos.

Lo que está fallando es la elección.


Pibe bueno, elegite una mina que sea buena también, pero no te hagas amigo, porque perdes automáticamente. Tirale onda de entrada y si no quiere saber nada, te comes el rebote antes de enamorarte como un idiota y hacerte la cabeza con cada cosa que hace o dice a ver si algún día cambia de opinión (desde ya te aviso, nunca).
Y vos, piba buena, empezá a elegir bien. Acá si hay alguien con derecho a histeriquear, POR GÉNERO, sos vos! Que no rompan las bolas!.

¡Esa es la clase de pibe que queremos todas!
El que siente que tiene que ganarnos, que se emociona ante el desafío de conquistarnos, el que nos invita al cine, a tomar helado, el que se interesa por conocerte, el que cada vez que entras al msn te saluda aunque acabe de verte, el que te presta atención, el que te mira con dulzura, el que te dice sólo cosas lindas, el que sabe mantener una conversación, el que disfruta de acompañarte, aconsejarte y mimarte. ¡Es el que está preparado para tener una relación! ¡Ese! Tampoco necesitamos que nos regalen flores ni nos digan cursilerías, simplemente que muestren un verdadero interés en nosotras. Y el que histeriquea siempre va a conseguir histéricas, y si consigue otra cosa no lo va a saber, porque la histeria es contagiosa y cegadora, es un juego de orgullos en el que no gana nadie. El que histeriquea no está listo para una relación, perdió la noción de lo que es el amor, de lo lindo que es conocerse, charlar, dejar crecer la tensión de a poquito, la adrenalina del primer beso, las fantasías de lo que pueda llegar a pasar, siempre con felicidad, nunca con frustración. Queremos al hombre bueno, honesto, y directo. Si nosotras nos rodeamos de histéricos, ¿será que son un reflejo nuestro? Yo digo que a la mínima señal de histeriqueo, tenemos que tomarlo como un indicador de que a ese chabon,
LE FALTA MUCHA CINDOR!


21 de diciembre de 2010

Y lo demás no importa nada!

Por un momento recordé todos los prejuicios que tenía cuando era más chica. Yo era rara desde muy chiquitita, sí, pero sin embargo me quedaba ahí, escondida, preguntándome cómo era la mente de los demás. No podía entender cómo no les importaba cantar cuando no sabían ni tenían la voz para hacerlo… ni vestirse de forma extraña o demasiado llamativa… ¿Cómo podía, aquel borracho, bailar completamente solo mientras todo el mundo lo observaba y hablaba de él?
En algún momento de mi adolescencia dejé de incomodarme ante esta gente que me resultaba tan desfachatada, quizás porque yo quería cambiar, porque ellos parecían divertirse muchísimo más que yo. La timidez, la inseguridad, el hecho de tener tan presente y darle tanta importancia a lo que piensen los demás, nunca es divertido, ni productivo, ni verdadero.

Porque una es feliz cuando no piensa en nada, cuando baila como si nadie la mirara, cuando canta sin importarle si desafina o no, cuando suelta una carcajada verdadera, cuando hace algo por sí misma, cuando se viste como tiene ganas todos los días, cuando los demás y sus opiniones simplemente no te influyen, cuando haces lo que QUERES hacer, cuando elegís tu camino y te equivocas y aprendes, y volves a elegir. Porque sos feliz cuando soñas lo que realmente queres soñar, no lo que te enseñan que es posible… porque TODO es posible… sos feliz cuando entendes que hay que aprender a gatear antes de caminar, y hay que aprender a caminar antes de poder correr… que la vida te da lo que necesitas cuando lo necesitas, para aprender lo que tenes que aprender, para evolucionar, para crecer cada vez más, para ser más vos y menos los demás. Para sacarte toda la mierda que te enseñaron en la escuela, en tu casa, en la iglesia, en la calle. Para encontrar tu propia sabiduría, tu independencia, y libertad, para CONOCERTE y encontrar todas las formas en las que podes llegar a la felicidad.

La felicidad es tan simple como dejarte ser…

Hoy no me importa nada. Soy la que canta afuera de la ducha y bien fuerte, la que toca la guitarra aunque no suene del todo bien, la que se anima a bailar sola en medio de la pista, la que no se pone lo que está en la vidriera sino lo que tiene ganas de ponerse. La que se anima a ser sexy y comportarse como un macho a la vez. La que escucha la música que le llega, no la que está de moda, ni bien vista por los demás. La que se pegó un par de porrazos fuertes pero no se arrepiente. La que se arriesga cada vez más, a pesar de lo que piensen todos, cueste lo que cueste, a hacer lo que me haga feliz. Y más feliz. Y más feliz. Y más feliz.

Dos más dos es cuatro. Lo que estás haciendo, lo que estás pensando, las personas que te acompañan ¿te hacen feliz?
¿No?
Entonces...
¿Qué estás esperando para hacer, pensar y estar en contacto con lo que SABES que te hace feliz?


"What could be more beautiful than truth and freedom?".
Nada. Absolutamente nada.

9 de diciembre de 2010

Pensando en vos

Hay alguien… en este momento, ahora, en algún lugar… que está pensando en vos.

Ya sé qué me vas a decir: que estás sola/o, que no tenés a nadie, que sos fea/o y que nadie te quiere (mejor comete un gusanito). Por algo estás leyendo este blog… sos medio emo, por si no te diste cuenta, te cuento. No te preocupes, no se lo voy a decir a nadie… *palmadita en la espalda*.

Pero te voy a convencer, vos seguí leyendo.

Te juego lo que quieras que mientras te devoras ese alfajor con toda devoción como dice Adrián, gordi, vos estás pensando en alguien, ahora, en este momento. De hecho, capaz hasta andas con el corazón medio roto y buscas respuestas en la Internés, algún consejo que tus cansadas/os amigas/os no saben darte. ¿Me equivoco? No, ya sé, yo siempre tengo razón aunque no me la den.

¿Y no se te ocurrió considerar la posibilidad- a menos que esa persona en la que estás pensando tenga pareja y sea muy feliz- que él o ella puede estar pensando en alguien también? ¿Cantando All by myself de Celine Dion en la ducha cuando nadie los puede escuchar? ¿Con angustia oral? ¿Mojando la almohada con amargas lágrimas mientras miran la última de Julia Roberts? “NO”, vos me dirás, “es una persona feliz, la tiene re clara, está llen@ de minas/tipos, etc”. Y yo te digo, VOS QUÉ SABES, BOLUDIT@! (de onda).

Esto es así, todos tenemos a alguien en la cabeza. Si no está en la cabeza, está ahí zumbando como mosca alrededor de la misma, y si no, bueno, está ubicado un poco más… al sur, en cuestión… digo…

A lo que iba es que, si vos pensas en él/ella y él/ella piensa en alguien más… y tus amig@s piensan en alguien, y TODO EL PUTO MUNDO ESTÁ PENSANDO EN ALGUIEN PORQUE NADIE NUNCA DEJA DE PENSAR SALVO CUANDO SE DUERME!!!…
Y vos sos una persona común y corriente que ha conocido cientos, quizás miles de personas en su vida… haciendo todos los cálculos matemáticos correspondientes (gente que conociste + gente que te conoce pero que vos no conoces + gente que ni te conoce pero igual te tiene de vista - gente que no está interesada en vos) ¿por qué no creer que también hay alguien pensando en VOS? Quizás hasta le rompiste el corazón a unos cuantos, o les generaste insomnio, o no se pudieron ir a dormir después de mirar alguna foto tuya hasta que… bueno… vos sabes… descargaron.

¿Cuántas veces te gustó alguien y esa persona jamás se enteró, por una razón u otra? (si me decís que todas se enteraron, me estás reeee mintiendo, no jodas).
Exacto.

Sea porque te quiere, porque te odia, porque l@ calentás, porque siente curiosidad, porque te extraña, porque te le quedaste revoloteando en alguna neurona...

Te juego lo que quieras, LO QUE QUIERAS, que alguien pensó en vos hoy.
(y capaz hasta se echó una paja).

3 de diciembre de 2010

La rueda de la fortuna

Hoy les dejo una maravillosa reflexión de un amigo... recomiendo que lo lean y piensen en qué parte de la rueda están... y si la rueda está estancada o si la están haciendo girar...

Palabra del día: Cíclico

Quién dijo que la rueda era el mejor invento de la humanidad?
Seguramente el que lo dijo venía de un fin de semana perfecto, en el cual seguramente tuvo mucho sexo y su felicidad era plena, los planetas se le alinearon y eso dio como producto semejante boludez.
Como invento para la creación del transporte no quedan dudas de que fue algo muy bueno, pero cuando gente al pedo como yo se la pone a analizar con un trasfondo determinado, le encuentro más desventajas que aciertos.
Supongamos que representamos el ciclo de la vida a través de la famosa rueda...
Alguna vez un músico dijo "la vida es una moneda", y todo el mundo pensó en cara o ceca, pocos creyeron que hablaba de su forma circular y cíclica. Bueno, a mi se me ocurrió verlo así...
The circle of life….


Nunca me gustaron las definiciones que dicen "la vida es...". Es mas, te diría que me molesta bastante cuando en el MSN leo que la gente tiene esas frases que parecen solucionar la existencia:
"La vida es una suma de momentos"... bravo, descubriste la pólvora... y un tren es la suma de muchos vagones.
"La vida es como te la tomas"... pará flaca, largá la tele porque viste mucho la propaganda de Sprite.
Esa es la razón por la que no lo encaro de esa manera, simplemente digo que los estados por los que uno pasa a lo largo de su corta o larga existencia, es extremadamente cíclico.
Buenos momentos, malos momentos, todas cosas que ocurren durante un tiempo, dejan de ocurrir y luego de un tiempo vuelven a pasar. Simple... cíclico...

Ahora pasemos al Art Attack y vamos a tratar de representar esto gráficamente. Nos vamos a la pizarra!


Como verán, representamos nuestro ciclo en este universo a través de la famosa vuelta al mundo: ese juego poco divertido que no hace mas que llevarnos a dar vuelta por una módica suma de dinero. Primero establecemos un sentido de giro: seamos buenos y decimos que va siempre para adelante. Luego dividimos la circunferencia en 2 partes: la de arriba y la de abajo. Seguido a eso, dividimos en otra mitad e identificamos la parte que sube y la parte que baja.
Resultado: 4 estados

-Arriba subiendo
-Arriba bajando
-Abajo bajando
-Abajo subiendo

Si se ponen a pensar un poco, a repasar sus vivencias se darán cuenta que continuamente pasamos por esto: momentos en que estamos bien y nos sale absolutamente todo, en plena remontada. Momentos en los que seguimos bien pero de a poco nos pasan cosas que nos hacen bajar. Los peores momentos en los que sentimos que caemos sin fondo y no hay límite. Y finalmente después del bajón, cuando empezamos a ser positivos y no queda otra que salir.
Ahí empieza todo de vuelta, como la rueda.

Por eso te digo: fijate de qué lado de la rueda te encontrás. Para algunos girará mas rápido, para otros más lento, o puede estar parada durante mucho tiempo.
No queda otra: "Just enjoy the ride". Todos estamos subidos en el mismo juego.

28 de noviembre de 2010

"Me gustas tal cual sos"

"Me gustas tal cual sos".

Mr. Darcy le dijo eso a Bridget Jones, ante su expresión de incredulidad.
Es que es así.
"Me gustas tal cual sos". Uno jamás piensa en cambiar absolutamente nada de la persona que le gusta... porque está bien, porque sus defectos también te parecen encantadores.

Es una paradoja, que ese "tal cual sos" casi nunca llega a ser visto por quien queremos que lo vea. Amigos, familia, inclusive extraños tienen acceso a tu verdadero yo, porque la verdad, es que te importa tres pitos lo que piensen de vos. Nunca haces algo por agradarle a un amigo, nunca te preocupas si un extraño no te quiere...

Pero esa persona que te está volviendo loca, justo esa, no, no podes mostrarle tu verdadero yo. Porque tu cabeza está entre los dos. Tu cabeza, pensando, maquinando, tratando de darle órdenes coherentes a tu cerebro para que tu cuerpo reaccione adecuadamente, calculadamente... como si pudieras saber qué quiere el otro, como si pudieras ser quien sos y quien él quiere que seas a la vez.

Entonces quizás un amigo o un completo extraño puede llegar a verte... y quererte así, como Darcy a Bridget. Y esa persona que hace que te bloquees, que no puede ver ni un 50 % de tu "tal cual sos", no puede enamorarse de vos. Ni de tu careta, porque lo superficial no llega al corazón.

¿No es irónico?

13 de noviembre de 2010

Recuerdos del futuro

Querida Yo del pasado:

Te escribo esta carta para brindarte paz, sabiduría y fortaleza. Quiero que sepas con absoluta seguridad -ya que yo no tuve la suerte de que me escribiera ningún Yo futuro- que todo va a estar bien.

Quisiera empezar por lo que crees que es tu propósito en la vida. De niña siempre creíste que ser alguien importante y respetado que cambiara las vidas de los demás era la misión de todas las personas que llegaron a este mundo, lo lograran o no. Pero es necesario que sepas que si bien podes hacer la diferencia para muchos, no viniste a salvar a nadie, ni a ganarte el respeto de tus pares, ni a cerrarles el pico a los que piensan mal de vos. No necesitas de nada ni nadie, porque sos una persona importante, digna y capaz de cualquier cosa desde el momento en que naciste... no sé por qué con el paso de los años lo olvidaste, pero aquí estoy para recordártelo.

A medida que crezcas descubrirás que en cada persona hay otras dos: la que verdaderamente es, y la que vos crees que es. Aunque al principio será difícil saber percibir cuál es la real, el tiempo lo dirá. Verás que aquellas personas que creías felices, son las más miserables. Aquellas que parecían tan especiales, no lo eran. Aquellas que parecían tan insignificantes, te pueden salvar la vida. Todo depende de la perspectiva que elijas. No te preocupes; tu vida no tiene por qué ser como las suyas. Cada cual hace lo que hace y está bien. No busques vengarte de aquellos que te hirieron; la vida les está enseñando a todos las mismas lecciones a través de diferentes experiencias.

Por eso, toma a las personas como compañeras de un viaje, pero no dejes que te influencien ni te repriman en tu camino. Solo escuchate a vos misma.

La relación más importante que tengas en tu vida, (descubrirás con el tiempo)… es con vos misma. Lo demás son sólo ingredientes que llegan para ayudarte a preparar el mejor pastel posible que puedas imaginarte. Cada hombre que hayas amado te dejará una enseñanza, una nueva forma de ver la vida. Cada hombre será el principio y el final de un capítulo, todos ellos son una puerta hacia el siguiente; no te detengas en el umbral, siempre hay algo más al cruzarlo. Y como todo buen libro que está compuesto de muchos capítulos, algunos hermosos, otros no tan lindos, y otros espantosos, llegará el final. Cuando llegue el hombre indicado simplemente lo sabrás. Él será la culminación de todo lo que creaste, amando y odiando, deseando y llorando. No te preocupes, el universo entero está conspirando para que se encuentren. No se te va a escapar, y él no se va a enamorar de otra. Él es tuyo y vos sos suya. No lo dudes ni por un segundo, él llegará solo, ni bien te animes a soltar los deditos de ese último umbral y des un pequeño paso adelante. Si no me crees, deberías verlo mientras duerme serenamente en nuestra cama en este momento. Es como un ángel.

Finalmente, quiero que sepas que aunque todo parece difícil en este momento, las cosas funcionaron de maravilla para vos. Te convertiste en quien querías ser. Tu cuerpo, tu alma, tu vida es todo lo que deseabas. Vivo en esta hermosa mansión casi por arte de magia, aunque sé que te lo debo a vos, por pasar tanto tiempo soñándolo, moldeándolo. Tengo un esposo millones de veces mejor de lo que había imaginado. Nos gusta viajar por el mundo constantemente conociendo nuevas culturas, disfrutando de hermosas playas, recorriendo ciudades antiguas. Nos casamos en París. No era una ciudad tan romántica como la pintaban, había muchas ratas, pero nos encantó de todas formas. Él es un excelente amante, un tipo sincero y el mejor amigo que pudiera tener jamás. Está completamente loco, igual que vos, y nos reímos tanto que lloramos. Nunca somos capaces de divertirnos tanto como cuando estamos juntos. Nos divertimos en cualquier lado, en cualquier circunstancia. Es emocionante estar a su lado… no queremos separarnos nunca. Me siento excelente, entusiasmada y apasionada por la vida… amo mi trabajo. Jamás pensé que podía conseguir trabajar de algo que amara tanto, pero lo conseguí. ¿Sabías que hay miles de trabajos de los que nadie tiene idea? Y no hay otra forma de encontrar tu trabajo ideal que persiguiendo las cosas que te gustan, ciegamente. Debería ser algo que haces sin esfuerzo, con ganas, con entusiasmo... y si no lo sentís, siempre podes cambiar de rumbo. Siempre.

Me es difícil recordar qué se sentía ser vos… vos de 7 años, vos de 15 años, vos de 18 años, vos de 24 años… pero si pudieras comprender y nunca olvidar estas cosas que estoy a punto de decirte, sé que jamás volverías a llorar…

Sos hermosa y perfecta, por dentro y por fuera.
Hay alguien diseñado especialmente para vos, al igual que vos estás diseñada para él.
Van a encontrarse en el momento adecuado...
El dolor siempre es pasajero, disfrutalo, es bello... el dolor causa inspiración, el dolor te ayuda a moverte hacia lo que deseas.
Vas a ser muy feliz.
Nunca es tarde para empezar nada.
Nada es tan importante como parece.
Jamás prestes atención a lo que dicen o piensan los demás.
Podes ser y tener todo lo que desees.
Lo único que necesitas para lograr todos tus deseos es confiar en mi…
yo YA los cumplí.


8 de noviembre de 2010

Las dos caras

[Edit: 1- está redactado como el orto. 2-estoy con cero ganas de corregirlo. 3-lo escribo más para mi que para ustedes (porque me olvido de las cosas después) 4- si no les gusta me chupa. 5-gracias y saludos a todos los que me conocen. (?) 6- si se quieren reír, pasen por mi blog nuevo, en una de esas se ríen. Y si no, son unos amargos. Chau.]


Cuando llueve, el flaco prefiere ni salir de la cama...
Pero muchos otros se levantan, se hacen un cafecito y esperan a que pare. Siempre para.

Ella sale de la oficina dando saltitos por la vereda, esquivando los charcos con cara de asquito...
Pero su compañero camina mirando hacia delante porque sabe que va a mojarse igual... y que después puede bañarse.

Él lleva un paraguas a 45 grados, luchando contra la lluvia que cae de costado...
Pero aquella está resignada a mojarse, porque aprendió que el viento es más fuerte que el paraguas.

Una apurada corre para encontrar un taxi que no encuentra...
Pero por al lado pasa un flaco que se pone la capucha y va escuchando música como si nada.

Una madre va a buscar a sus hijos al colegio, y los hace correr hasta el auto...
Pero su hija camina tranquilamente disfrutando del paisaje mojado, sabiendo que no falta demasiado para llegar a casa para secarse.

Qué curioso es que nunca queramos mojarnos en un planeta en donde llueve cada dos por tres. En un mundo en donde aunque estés al resguardo de tu propia casa, puede haber una gotera. O varias. O hasta se te puede caer el techo.
Y aunque te apures, corras, hagas la parabólica para que el paraguas no se te doble con el viento, saltes los charcos a lo Mary Poppins, te compres el ultra-paraguas 3.0, te gastes la guita del almuerzo en el taxi, te quedes debajo de un techito aprendiéndote una vidriera de memoria, hagas tiempo en un café deprimente oliendo perfume barato de vieja… sabes que, con o sin tormenta, vas a tener que seguir, como sea.

Cuando hay tormenta, ¿pensas que te va a caer un rayo encima, porque tenés una suerte de mierda? ¿O estás seguro de que el rayo tiene algo más importante que destruír que un pobre diablo como vos? Siempre hay más opciones de las que ves... solamente tenés que permitirte verlas. ¿Quién querés ser? ¿El que disfruta únicamente del cielo despejado, o el que sabe que aunque esté nublado ahora, el sol siempre estuvo (y va a estar) ahí?

No importa cuánto tardes o de qué forma lo hagas, qué es lo correcto o lo equivocado; lo importante es tomar una decisión, y retomar el camino.
La vida una y otra vez presenta las mismas situaciones. No podemos hacer que pare de llover, pero sí podemos elegir: continuar el viaje ya emprendido, o cambiar de rumbo. Eso sí: no te quedes bajo la lluvia esperando que algo cambie, porque aunque salga el sol, nunca va a faltar una nube conchuda y oportuna que te venga a empapar cuando menos te lo esperes.

1 de noviembre de 2010

No lo digas con palabras

Antes, hace no muchos años, en este mismo pueblo y en el tuyo también, amiguito, cuando querías comunicarte con alguien, ibas a la casa a tocarle timbre, o tal vez podías ir a lo de una vecina o a un teléfono público para llamarlo. No pasó demasiado tiempo desde que hubo un salto en la tecnología y ahora podemos comunicarnos de veinte mil formas distintas. Cuántas veces ahora, pebete, le dejas un mensaje en el caralibro a tu amigo preguntando qué hacen este finde, con la intención -claro- de que su hermana (queestarebuena) lo lea y se prenda en la salida?
Ahora hablamos un montón, hablamos más que nunca, pero... ¿nos entendemos realmente?

En estos tiempos de mi infancia y adolescencia, no existían excusas del tipo "no tenía crédito", "estaba ocupado y por eso no te contesté", o por el contrario cosas como "estoy aburrido, contame algo", "che de qué canción es tu nick?" etc etc. Tampoco (ni siquiera en la era Fotolog) uno le posteaba algo a otra persona pensando en un tercero que puede -o no- llegar a leerla. No había forma de enterarse - a menos que alguien te contara-a qué lugares iba a ir tu amor platónico elchicomaslindodelcolegio los fines de semana para cruzártelo "de casualidad".

Así mismo, la gente era mucho más directa... Vos sabías que fulanito estaba muerto con vos porque los demás te lo decían, porque lo veías sonrojarse cuando pasabas, porque se quedaba colgado mirándote en clase... no te lo dudabas por la cantidad de mensajitos de texto que te mandó o cuántas veces hizo comentarios en tus fotos perras de Facebook. En la época de mi secundaria, se hablaba de "encarar". ¿Existirá eso todavía? Los chicos ya histeriqueaban -no se crean que esto no se venía gestando desde un par de generaciones anteriores-, pero llegado el momento, se armaban de coraje y sin decir nada, te rompían la boca en algún lado. Las casualidades no eran casualidades, al igual que no lo son ahora, pero todos éramos conscientes de eso.

Creo que en el medio de este cambio que sufrieron nuestras vidas (y digo sufrieron, porque me resulta bastante obvio que nos está perjudicando), nos olvidamos que un simple gesto puede decir más que mil palabras. Que de hecho, la mitad de las veces las palabras que decimos son solamente palabras, para charlar, para reírnos, una excusa. Las intenciones que van detrás de las palabras son igual de visibles, pero...

Digo, con tanta era digital, ¿no nos estaremos quedando ciegos a cosas obvias? ¿no estaremos perdiendo la capacidad que antes teníamos de interpretar un lenguaje universal? ¿no estaremos olvidándonos de leer lo que realmente importa? ¡¿NO ESTAREMOS PERDIENDO LOS HUEVOS, TODOS?!

21 de octubre de 2010

¿Quién sos?

Siempre pensé que una persona jamás puede llegar a entender tanto a nadie como se entiende a sí misma. Como en el cuento de la cebolla, fuimos incorporando tantos miedos, tantas inseguridades, tanto dolor, que aprendimos a llevar capas y capas cubriendo quienes realmente somos para protegernos de los demás.

A veces son tantas capas que perdemos de vista lo que hay adentro; a veces nos convertimos en lo que los demás piensan que somos, porque es más cómodo que quedar expuestos. Y entonces llega un día en que, aunque nosotros tenemos un concepto de quienes somos, descubrimos que los demás opinan distinto... hasta llegan a pensar que somos todo lo contrario a lo que creemos ser.

Entonces ¿Quién sos? ¿Sos quien realmente sos? ¿Sos lo que los demás creen que sos?.
Algunas personas llegan a pelar varias de tus capas, y otras, ninguna. En otros casos hasta nos agarramos capas extra por las dudas. Por eso, la perspectiva del otro sobre uno casi siempre es errada, al igual que la nuestra sobre los demás. Quizás solo quienes nos buscan sin cesar tras la piel sabiendo que somos mucho más de lo que mostramos, son los que nos llegan a conocer de verdad.

Él opina que sos divertida. Ella opina que sos aburrida. Vos opinas que sos callada, él opina que sos extrovertida. Tal vez ninguna de estas perspectivas esté equivocada, porque al fin y al cabo cada cual vive su verdad. Pero es sólo la punta del iceberg. No son muchos los que logran quitarse de encima todas las capas dejando que el mundo entero (inclusive ellos mismos) los vea tal cual son. Por eso, si todos nos quedamos en la superficie, no me extraña el hecho de que nos enamoremos cada vez menos...

Vivimos en un mundo en donde aprendimos a protegernos (escondernos).. ¿A protegernos de qué? ¿Del rechazo? ¿De la crítica?

Si lo que queremos en definitiva es amar y ser amados, solamente tenemos que empezar a buscarnos bajo todas estas máscaras y dejarnos salir a jugar...

"A la mierda lo que piensen de nosotros, a la mierda lo que digan los demás."
(Babasónicos).

11 de octubre de 2010

El soltero eterno

Siempre les tuve un rencor bárbaro a los mujeriegos. Me daba una sensación de que usan a las mujeres como usan los forros, polvito y a la basura. Pero he aquí mi evolución en cuanto a lo que pienso de ellos –gracias a AÑOS de experiencias y charlas con amigos- para que quizás puedan, ustedes también, verlos desde otra perspectiva.

Ese cancherito que las tiene a todas atrás, que se come una distinta cada fin de semana… estoy segura, pero segura, que por más distracción que obtenga de sus aventuras… es un infeliz.

Seguramente, si una se pone a indagar en la historia de esta clase de flacos –y créanme que lo he hecho, porque soy muy curiosa-, va a encontrar al menos una mujer (frecuentemente, varias) que le rompió el corazón. Ya sé, a todos nos rompen el corazón alguna vez. Pero estos tipos quedan tan lastimados, tan heridos, tan estancados, que piensan que nunca más van a encontrar otra como esa. Y no quieren encontrar otra como esa, tienen un miedo paralizador de volver a enamorarse.

Tanto miedo, que se juran que nunca más van a dejar que les vuelva a pasar lo mismo. Entonces en el momento en que vuelve a gustarles una chica, se alejan. Inevitablemente vuelven a buscarla, y se dan cuenta que les gusta más de lo que pensaban, lo cual les produce TERROR. No se sienten merecedores de ser amados, se quedan con esa impresión que les dejó el amor no correspondido... realmente creen que siempre va a ser así.

Busca, una y otra vez, a través de muchas mujeres, llenar un vacío que sólo tiene el poder de llenar él mismos, responsabilizando de su miseria a esa/s mujer/es que no lo amó/amaron.

Están en un círculo vicioso del cual no pueden salir…por más que quieras abrirles los ojos y decirles que el amor está en uno, no en los demás… que para ser amado hay que quererse lo suficiente y permitirles a los demás amarte… el cambio no lo podes forzar; el cambio se produce en el momento en que ellos solitos dejan de lastimarse a sí mismos y de alguna forma, reencuentran la esperanza.

Quizás te preguntas por qué con vos no cambió y con ella sí… es simple, porque cuando te encontró a vos, se sentía tan mal consigo mismo que no supo verte… y vos necesitabas algo que él no podía darte.

Los veo dar vueltas y vueltas… pero no me preocupan; es solamente una cuestión de tiempo hasta que puedan salir.


Él sigue buscando algo que no puede encontrar
Acompañantes de madrugada
Dolor ahogado en tóxicos
Solución efímera de la paz

Él sigue buscando algo que no puede encontrar
No ve sus miradas
Su propia voz lo ensordece
Se aísla aumentando la ansiedad

Él sigue buscando algo que no puede encontrar

Enfoca la carencia
Ignora la presencia
No camina, se deja llevar

Él sigue buscando algo que no puede encontrar
Persigue lo perdido
No recuerda haber ganado
Me encuentra… no se da cuenta

Y él… sigue buscando algo que no puede encontrar.

20 de septiembre de 2010

Ser minita no es cosa de 15 minutos

Los tipos se quejan de que no podamos ser siempre tan espontáneas como ellos. Que por qué no podes vestirte en dos minutos y salir. Que por qué si te invito a las 8 no podes estar lista a las 9, que tenes una hora entera.

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAH!

Furia.

Te voy a explicar por qué.

Porque la diferencia en los procesos de preparación de una mina y de un tipo, es abismal. Claro que, depende del evento para el que una se prepare. No es lo mismo ir a lo de una amiga que salir a bailar, por ejemplo. Aunque para el hombre, el proceso es siempre el mismo:

1- ducha

2- se afeitan si tienen ganas

3- se ponen lo primero que encuentran.

Listo. No les toma más de 15 minutos prepararse para ir a donde sea.

Pongamos el ejemplo de una parejita de novios recién formada se van a encontrar para ir a cenar y pasar una noche íntima. Mientras a vos, nene, te toma 15 minutos, tu chica está SUFRIENDO.

Primero nos bañamos, sí, igual que ustedes. Pero nosotras tenemos PELO. Pelo que hay que lavar, desenredar, acondicionar y ocasionalmente, darle con un baño de crema porque sino no aguanta.

Mientras que ustedes se afeitan cuatro pelos locos de barba, nosotras tenemos que asegurarnos de estar pelos FREE por todos lados. Y como somos unas rompebolas de mierda (o será porque ustedes son los rompebolas con ese tema), hasta que el último pelito no salga, no podemos terminar. Y no me hagan cara de “AYY! QUEE ASCOOO! Pelos!”, porque ustedes también tienen, por todos lados, mucho más largos y feos que los nuestros, no se los depilan y NOSOTRAS NO DECIMOS NADA (mal que hacemos, por cierto). El tema de la depilación es una mierda. Lo hagas con maquinita eléctrica, cera, maquinita de afeitar, crema depilatoria… ningún método es cien por cien efectivo, más que darle duro y parejo con mucha, muchísima paciencia. La cera te quema, la eléctrica te tira pelito por pelito, la maquinita te lastima. Una mierda.

Después, como somos mujeres y se supone que seamos suaves y perfumadas, nos encremamos, de arriba abajo. Qué horror descubrir, que no te cortaste las uñas de los pies, o que tenes el esmalte hecho un asco. Eso también hay que arreglarlo.

Cuando finalmente estás limpia, depilada, y perfumada, no es cuestión de elegir la ropa y se acabó. Tenés el pelo hecho un quilombo así que te lo tenés que peinar, porque no vas a salir así. Lo cual, a algunas puede llevarles horas de planchita o secador.

Ni hablar de la cara, las ojeras del cansancio que tenes de toda la preparación previa no pueden quedar así, además querés estar resplandeciente para tu chico y te pensas que un poco de delineador y rubor te van a hacer el favor.

El momento de elegir la ropa para una chica es frustrante. Jamás podría ponerse lo mismo que se puso el día anterior o lo que tenía puesto antes de bañarse. Empieza a sacar ropa del armario buscando algo que no encuentra y termina entre montañas y montañas de cosas, para darse cuenta que esa remera que quería, jussssto estaba para lavar. ¿Es un tornado? ¿Es un terremoto? No, es una chica viendo qué ponerse. Se prueba absolutamente todo. Se decide por algo -no tan satisfecha- y se da cuenta que los zapatos que tiene no combinan con lo que eligió, que por qué no fue a comprarlos mientras tenía tiempo, que ahora ya es tarde, que qué me pongo, que esto me queda horrible, aay que frustración, la puta madre, me voy a terminar poniendo lo mismo de siempre…¡NO TENGO ROPA! *freaks out*.

Finalmente se cansa de revolver, y elige un atuendo que ya se había puesto –muy de mal humor ya-. ¡OJO! Eso no es todo. Como es una velada romántica, hay que tener en cuenta también la ropa interior, no es cuestión de agarrar la primer bombacha que encuentres en el cajón porque lo más probable es que sea una de las "cómodas", esas que tienen algún agujerito y el elástico medio estirado ya por el uso. No sólo tenés en cuenta cuál es más linda, sino que considerás los gustos de tu compañerito, más el hecho de que según la ropa que hayas elegido, la bombacha puede notarse o no, y arruinar tu bella silueta trasera. Ni hablar del corpiño, que si tiene push-up después puede ser un factor decepcionante, pero que si no tiene no "levanta", y el escote te queda mal.

Una vez resuelto todo eso, necesita preparar la cartera. A ver cuál pega con la ropa y la ocasión, y ENCIMA es lo suficientemente grande (o chica) para llevar lo que necesita llevar. Todo un tema, no como ustedes, señores que llevan la misma mochila andrajosa desde la secundaria o se meten las llaves y la billetera en los bolsillos y ya.

Entonces, queridos… sabiendo ahora que nosotras pasamos por TANTO quilombo cada vez que los vamos a ver… NO ROMPAN LAS BOLAS SI TARDAMOS.



A menos que finalmente acepten que no tenemos tanto tiempo para gastar en complacerlos, y nos quieran igual, a pesar de todo, como nosotras a ustedes. :D


5 de septiembre de 2010

A.D.I.D.A.S (nosotras también somos pajeras)

La otra vez me preguntaron si es verdad que los hombres piensan en sexo, mientras que las mujeres pensamos en hombres.
Me pareció una frase muy coherente. Las mujeres pensamos todo el día en el tipo que nos enamoró, o con el cual estamos actualmente encaprichadas, o absolutamente babeadas... sí, verdad.

Me intriga cómo piensan los hombres… Calculo que a cada mujer “dable” que ven, la desvisten mentalmente, y usan imágenes cotidianas (por ejemplo cuando la señorita se agacha para levantar la lapicera, o cuando toma de la botellita de agua) para crear y alimentar las fantasías. (De ahí que cada cosa que decimos o hacemos, es un pretexto para alguno de sus chistes sexuales, porque de hecho, mientras vos estás conversando lo más ingenuamente con ellos, los animales ESTAN PENSANDO EN SEXO).
No es la mujer en cuestión, sino cualquier mujer, (o cualquier hombre), porque lo único que importa es ponerla (o que se la pongan).
Eso parece. Si esto realmente es así,
no me extraña que vivan alzados.

Las mujeres, por otro lado, nos obsesionamos. No importa si hay/hubo/habrá sexo, amor o confusión, tenemos una fijación insoportable e irreprimible que nos lleva a pensar en EL chabón todo el tiempo. Y flasheamos. ¡Qué lindo que flasheamos antes de frustrarnos si no conseguimos lo que queremos!… Sí, soñamos con atardeceres, corazoncitos, arcoiris, chocolates, serenatas, la luz de la luna, te quieros, caricias, halagos, rosas, besos apasionados, más caricias, halagos, anillos, te amos… algunas llegan hasta el casamiento, la casa con el perro y cuatro hijos.

Pero he aquí el secreto que ninguna mujer quiere que sepan, hombres. Además de, (de vez en cuando, NO SIEMPRE!) imaginarnos de la mano saltando en praderas llenas de mariposas, los bajos instintos se apoderan de nosotras
. No me importa si lo niegan a muerte, yo soy una de ustedes y a mí no me pueden mentir, manga de pajeras (de onda).
El beso tierno se convierte en un beso agitado, la ropa empieza a volar, el espejo se empaña, ÉL te envuelve en sus brazos… y cuando nos damos cuenta, estamos en el trabajo frente al monitor con la boca semi-abierta chorreando un hilo de baba, en la facultad haciendo garabatos en el margen de la hoja sin la más mínima idea de lo que dijo el profesor, o en el medio de la calle escuchando un tema cachondo y a punto de ser atropelladas por un colectivo, porque estábamos en Pijalandia.

La única diferencia entre ellos y nosotras, según mis observaciones, es que ellos distribuyen su calentura entre muchas mujeres, inclusive extrañas que jamás volverán a ver, por lo cual, su calentura tiene las mismas proporciones para con cualquiera de ellas. Osea, da igual con quién se la saquen; polvito y como nuevos.

En cambio nosotras, acumulamos calentura con UNO solo por vez. Y por más que vayamos a buscar otro para hacer los trámites, esa calentura está bien guardadita en un depósito de fantasías para el cual sólo ÉL tiene la llave.


Por lo tanto, dos conclusiones:
1. Arreglemos la frase: Los hombres piensan en sexo con quien sea, mientras que las mujeres pensamos en sexo con un hombre específico.

2. Cuando una mujer te tiene ganas, te tiene más ganas acumuladas de las que vos –señorito- acumulaste en un año entero con todas las mujeres que te cruzaste.
So... Agarrate, papi. ;D

30 de agosto de 2010

Agua en la pileta

Qué onda, alguna vez me pasó que me dijeron "¡tirateee, tirateee, que hay agua en la pileta!!", porque claro, sólo los demás son capaces de ver si hay agua. Y no había un carajo, o había, pero no era suficiente como para que no me pegara terrible porrazo en la cabeza contra el fondo. Lo peor es que las gilas de tus amigas te amasan tanto el cerebro para que te saques las inseguridades, que terminas creyéndoles. Y vas tan segura de que encima de estar llena, la pileta tiene agua calentita, bichos free, y adentro te espera un negro africano musculoso de labios carnosos ofreciéndote una caipirinha, que haces un salto triple mortal en el trampolín (por hacerte la gata nomás) y aterrizás boca abajo haciendo patín de pechito hasta chocarte contra la pared de la pileta, no sin antes comerte unos cuantos bichos muertos en el camino.

Pensar que otras veces una ni SABE no sólo de la existencia del agua, sino de la pileta entera, por más grande y obvia que parezca para los demás. A veces qué sé yo, no le prestás atención a si tiene una pileta o no el chabón, porque te chupa un huevo si podés o no nadarle ahí. De hecho una puede vivir entre tantas piletas medio llenas que si se diera cuenta, podría caer prácticamente en cualquier lado y flotar tranquilamente.

Pasa que ahora no es como antes. Ahora no es que la pileta está con un poquito de agua, a la mitad, rebalsando, o si encima tiene de esos angelitos culones que tiran agua por el pitito en el medio. Ahora las piletas están habitadas por aguas danzantes invisibles, parece que te quieren pelotudear, porque por un momento están formando olas a lo tsunami, y al otro, la pileta está más seca que chochi de vieja frígida.
Peor que tirarse a una pileta que está seca y llena de hojas que ni se juntaron en todo el otoño/invierno, no hay. Y por eso en estos tiempos todos vivimos arriba del trampolín.

Como si no hubiera escaleras, ¿no? Porque tiene sentido que si hay una pileta, hay agua y hay trampolín, también está la opción de usar la escalera tanto para ir metiéndote de a poquito e ir tanteando la cosa, como para salir cuando o bien estás ahogándote, o te la diste contra el fondo y necesitás ir a curarte el chichón. Pero no sé, a la gente le da paja, porque todos quieren estar en el agua YA, divirtiéndose con el flota-flota. Nadie tiene la paciencia para tomarse el tiempo de bajar la escalerita cuando tienen tanto calor, si pueden hacerlo de una.


Pero pasamos tanto tiempo pensando en cómo entrar, que nos quedamos con las ganas de agitar el flota-flota. ¡Vivimos en el trampolín, SEÑORES! ¡EN EL PUTO TRAMPOLÍN! ¡Estamos tan cómodos ahí que hasta hacemos campamento y cantamos canciones pedorras alrededor de la fogata, para poder vigilar las mareas! ¡Por si nos decidimos! ¡Por si juntas huevos, porque hay muchos queriendo tirarse de ese trampolín y te están empujando para pasar!

Si no pasas, si te quedás ahí, corrés peligro, man. No podés estar indeciso en el trampolín. Dicen que las guachas de las aguas danzantes éstas, si las mirás demasiado te hipnotizan y te hechan un gualicho que se llama enamoramiento. Por eso la mayoría cierra los ojos y salta, les importa un pito si hay agua o no. "Al carajo, no voy a perder tiempo en ésta, hay muchas piletas, quiero usar el flota-flota YA".

Pero de vez en cuando te quedás esperando en alguna pileta, y de vez en cuando no es tan fácil cerrar los ojos y "que pase lo que pase". De vez en cuando tenés ganas de bajar por la escalerita, pero lo reprimís porque tenés miedo a resbalarte, o a no encontrar nada al bajarla excepto una gran decepción, que es peor que un simple porrazo.

¿Será que los porrazos y las decepciones que vivimos, en vez de hacernos más fuertes y valientes, nos hicieron creer que nunca más encontraremos dónde nadar?

Qué miserables que somos, entonces.

24 de agosto de 2010

Bésame mucho (pero bien ¬¬)

Uno pensaría que después de tanta práctica de revolear lenguas y probar bocas en los boliches, la gente está entrenadísima en cuanto al tema de los besos. Sin embargo, como siempre dije, la cantidad no hace a la calidad, y nos terminamos encontrando con cada sorpresa que preferiríamos habernos quedado mirando una película en casa.
Qué sé yo, les gusta decir que hay que besar muchos sapos antes de encontrar al príncipe, pero no avisaron que todos los sapos besan igual que como cuando se morfan algún bicho.


Y es así como terminamos, por ejemplo, con una persona que seguramente se agarra una tortícolis, porque mantiene la cabeza girada sin moverla hasta que se le quiebra el cuello (¿será por eso que las minitas ahora se sacan todas las fotos con la cabeza torcida? ¿Les quedó así?). O de esos que te dan lengüetazos tensos como si estuvieran practicando esgrima en tu boca, o los que tienen la manía de la “lavadora”, que no paran de girar la lengua (generalmente para la derecha, a menos que sean zurdos). Después están los Succioneitor, esos que te abren la boca como para tragarte la mitad de la cara al estilo anaconda y te dan ganas de decirle que juegue a meterse un alfajor entero en la boca como hace Tinelli, porque seguro que puede.

Ni hablar de los babosos, esos que están tan ocupados en revolear la lengua que se olvidan de tragar la saliva, y no se contentan solamente con babearte toda la cara, sino que después te hacen un río pegajoso desde el cuello, a la oreja, y nuevamente a tu boca…


Están los apasionados mordedores, que a veces se zarpan y te lastiman la boca, te chocan los dientes y/o te dejan unos chupones que parece que te hubieran cagado a palos. Esos se van al carajo, aunque lo opuesto tampoco está bueno; un poco de pasión nunca viene mal, nadie quiere un “besador en coma”. Esos que apenas abren la boca, y usan muy poco la lengua, como si tuvieran miedo a dejarte embarazada vía saliva.
Y por último, el más desagradable diría yo, aquel que no se lavó nunca los dientes desde la semana pasada y todavía apesta a salamín (por suerte si una tiene el olfato desarrollado, puede zafarla antes de cometer el grave error de besarlo).

Por eso, con mi amigo Montado De Un Huevo (quien trajo esta idea a la mesa y escribió muchos de estos ejemplos), recolectamos unos consejitos para que no seas un bajón a la hora de besar:

-Por el amor de DIOS, lavate los dientes o comprate un chicle.
-Cerrá la boca en algún momento, hij@ de puta!
-Tragá tu baba, respirá, frená un toque!
-Tratá de poner los dientes detrás de los labios, porque si me rompés los míos, me vas a tener que pagar el dentista.
-Movete, chiquit@, movete! Cabeza, lengua y labios, no una sola cosa, todo!
-Empezá suave, lento, con los labios. La lengua de una no garpa, esto no es una inspección de esófago.
-Variá la velocidad, andá aumentando la intensidad… un beso debería ser como una buena canción.

1 de agosto de 2010

Odio decir "te lo dije"

1. NO IMPORTA cuánto te prometa el mundo, no va a cambiar.
2. La gente cambia, sí, pero por sí sola, por error y aprendizaje, no porque vos se lo pidas.
3. Un amigo que te tiene ganas no es un amigo.
4. A el chabón no le interesa lo que tenés puesto, si tenés el pelo lindo lindo, si se te corrió el maquillaje, si sos tonta o inteligente; te da o no te da, así o con cara de zombie con joggings agujereados.
5. ESTÁ BIEN ser minita de vez en cuando y sentirte fea/pelotuda/insalvable... pero no significa que lo seas.
6. Cojer no te va a hacer sentir mejor si estás mal, al menos no por más de un par de días.
7. Forzar las cosas no sirve para nada, es como ir al baño cuando no tenés ganas.
8. No podes entender la conducta de los demás, mucho menos podes controlarla; lo único que podes manejar son tus reacciones y tus pensamientos.
9. Si querés llorar, llorá, no escapes. Si querés pegar, agarrá la almohada. Si querés matar, tené cuidado porque vas en cana.
10. Si te escapas no me vengas a contar lo mal que la pasaste porque ya lo sé, salame.
11. La guita tampoco resuelve todos los problemas.
12. Las segundas oportunidades son segundas por una razón, y es porque la primera no funcionó. DUH!
13. No te mientas diciendo que vas a divertirte con tus amig@s nada más, cuando sabés que vas porque esa persona puede estar ahí.
14. Estar en pareja jamás debería interferir con tus amistades.
15. Si una persona en la que confiás hace algo que va contra tu moral y aún así seguís confiando en ella... jodete.
16. Si todo el mundo te dice lo mismo, es por algo. HOLA?
17. Dejá de maquinar, lo que es, es. Lo que será, será.
18. Nadie te cree cuando decís que l@ superaste.
19. Tratar de llamar la atención de alguien es patético.
20. Viví y dejá vivir. Dicen que todo cambio es para bien... (y si no, estamos todos al horno, porque no podemos evitarlo).
21. Nunca vas a enamorar a un hombre por llevarlo a tu cama.
22. El que mucho abarca poco aprieta.
23. Y si aprieta, qué te importa.
24. Aferrarse a algo es resistirse a seguir adelante.
25. Pensa con el cerebro, no con las hormonas.
26. No me vengas con pucherito cuando TE LO DIJE.

(Para mis amig@s con amor, ustedes sabrán qué frases son para cada uno de ustedes)

16 de julio de 2010

Si te pica, rascate

Si la naturaleza biológica del hombre es desparramar su semen en cuanta hembra logren conquistar para así procrear contribuyendo a la evolución, ¿por qué les cuesta tanto irse luego de terminar el trabajo? Hay cosas en las que jamás evolucionan…Y es que- sin ánimos de ofender, mis adorados hombres-, nunca aprendieron a decir adiós cuando corresponde: a tiempo.

En toda pareja, a menos que sean almas gemelas inseparables forever and ever, surge en algún momento una duda. Dudas de cualquier índole, dudas pelotudas, dudas importantes, dudas pensadas desde los genitales.

"¿Esta persona realmente encaja con lo que quiero en mi vida? ¿Puedo seguir para siempre escuchando esta mierda de música que pone todos los días? ¿Puedo bancarme que le mire el culo a la vecina, por más que no tenga chance? Si se rapara ¿puedo seguir amándolo? ¿Y si quiero otra pija, eh? ¿Y si quiere otra concha? ¡¿EHHH EHHH?! "

Y una vez que te ataca una duda, sabes que empiezan a aparecer más, como cuando te pica un mosquito y le pegas un manotazo pero te quedás mirando alrededor frenéticamente esperando ver dónde están los demás. Aparte de aparecer en manadas, los mosquitos y las dudas tienen en común que rompen tanto las pelotas que te cansas de espantarlos porque siguen volviendo.


Y entonces, las peleas.
Y entonces, el sexo de reconciliación.
Y entonces, las discusiones.
Y entonces, el “voy a cambiar”.
Y entonces, más sexo.
Y entonces, se pudre todo.

Todos sabemos que somos como somos, y que si no te la bancas como es, estás frito. Es en estos momentos, cuando el chabon que aparentemente te dice que va a cambiar y que todavía te ama, también está re contra podrido de todo, como vos. Los dos están pensando que ya no quieren estar juntos, pero acá es cuando la FALTA DE HUEVO (lo pongo en rojo, porque es un peligro) entra en juego y ocurre una de estas dos situaciones:

1. Si es un forro malparido, te caga. Se va con otras minitas, consigue la vida de soltería que tanto quería, y mientras tanto te mantiene ahí, “por las dudas”.
2. Si es un simple idiota, se enoja, no cambia un carajo y se queda esperando que te canses y digas basta.

Vale aclarar que a pesar de cualquiera de las dos situaciones, los salames se terminan arrepintiendo porque se dan cuenta que mil conchas no valen una buena NOVIA.

Me dijeron por ahí, y quisiera creerlo, que cuando llega la crisis (u otra mujer), algunos hombres son capaces de decir exactamente lo que piensan y cortar la relación. Pero les advierto, nenas, que son la minoría; así que si les empieza a picar, en vez de ponerse a espantar los mosquitos, busquen un buen Raid… y al carajo.

12 de julio de 2010

Playground Love

Pasaron los años y las cosas cambiaron... o quizás no cambiaron en absoluto.

Cuando pensaba en él, me sentía chiquitita. Imaginar su sonrisa me trasladaba a un mundo de magia en el que lograba vislumbrar la felicidad todavía lejana pero latente, como cada nota en esta canción me envuelve en sus brazos de destellos dorados prometiendo que todo va a estar bien.


El castillo que veía en el horizonte, aquel por el que tantos kilómetros había recorrido en busca de todas las cosas que siempre había soñado, se fue perdiendo en un bosque de hiedras venenosas y serpientes, uno que jamás me atrevería a cruzar, temiendo el dolor de morir a medio camino. "Como mueren los valientes... o como mueren los tontos", pensé.

De espaldas a la luz, cerré los ojos, dejando que las manos frías me atraparan para llevarme a nuevos caminos de máscaras, confusiones y miedos. Es fácil perderse cuando dejas de lado el camino que sabes que tenes que seguir...Cuando al fin me dí cuenta: lo único que estaba obstruyendo la luz era yo.

El bosque amenazador comenzó a ceder, haciendo desaparecer poco a poco cada una de sus ramas puntiagudas, sus oscuras criaturas y los peligrosos laberintos que conformaba.
Me volví a la luz, y allí estaba, mi castillo, mi felicidad. Las mariposas danzaban a su alrededor como si la primavera nunca se hubiera ido. Las nubes parecían copos de algodón, y sólo bastaba creer y saltar con los brazos en alto para poder tocarlas. El mundo de fantasía existía únicamente para aquellos que quisieran verlo sin temer.

Su sonrisa surgió como el alivio que produce el sol después de una noche helada. Ya no temía, ya no me desesperaba llegar al castillo: ahora podía simplemente disfrutar del camino y de lo que me encontrara en él.

La simple presencia del castillo con el bello príncipe esperándome no había hecho otra cosa que sembrar esperanza, y yo, dolida por la espera del arduo camino, no había hecho más que dejar de avanzar hacia aquello que desde un principio siempre había sido mío... él y su sonrisa sólo se encontraban en lo alto de la montaña porque yo los había imaginado allí.


La rueda había dado una vuelta completa, había cumplido su ciclo.
Y ahora, aquello que tanto dolor me producía, me hacía bien nuevamente. Ahora me deleitaba su existencia. No era más que otro maravilloso ser que me acompañaba ayudándome a aprender en este mundo de plastilina al que yo tengo el poder de moldear a mi gusto.


No hace falta pensar ni luchar... este lugar es todo nuestro, dediquémonos a jugar.

25 de junio de 2010

Dar bola

Él: me doy cuenta que donde no me dan bola me canso...y donde me dan mucha bola... me pudren.

Yo: sí, como todos. Al final una nunca sabe cuánta bola darles.

Él: Y a ustedes les pasa lo mismo.

*piensa*

¿¿¿¿¿...????


Cantidades proporcionales de bola... en función de... ¿en función de...?

Tiene que ser proporcional porque si no hay equilibrio de... bola... entonces... demasiada bola y poca bola pudren. Mejor dicho, demasiada bola se torna denso... poca bola hace que ésta desaparezca. Que te den mucha bola es como que te caguen a pelotazos y no sabes para donde apuntar y llega un momento que decís, BASTAAA, dejame vivir, dejame pegarle a otras pelotas, dejame descansar. Y si no te dan bola... y no te dan bola... y no te dan bola... o te quedas ahí esperando como un pelotudo hasta que te cansas y te vas... o te vas a la mierda y te olvidas que la bola estaba.

La bola tiene que picar de un lado y del otro. Pin, pan, pun, pin, pon, ping pong ¿?
Podría decirse que es como el partido ese de tennis que fue interminable... hasta que uno de los dos se calentó y la terminó. ¡ZASSSSSSSS! ¿Por eso se dice "dar bola"? FAAAAA...


*cortocircuito*

21 de junio de 2010

No todas las mujeres piensan lo mismo... o sí.

El Inalcanzable:

Al instante en que lo veo las rodillas se me aflojan, me sube una corriente de calor desde el cuerpo hasta la cabeza, y por dentro pienso “ME MEEEEO”. Prefiero desviar la vista, porque si me llega a mirar, siento que me ahogo en baba hasta desmayarme. Tiene la mirada perdida en algo que no llego a distinguir, no va mirando culos y tetas como los demás, está callado y claramente no le causa ninguna diferencia a su existencia que yo esté en la misma habitación. Parece estar en su propio mundo, como si viviera en una cajita de cristal a la que nadie puede entrar. Me hago la boluda, me río, me toco el pelo, comento una estupidez con la persona que está al lado con un hilito de voz, pero él no escucha, o seguramente piensa que soy una boluda. Y fea. El hombre Inalcanzable ni siquiera me mira, y cuando lo hace, es la mirada más fría del mundo... sin embargo a mí me hierve la sangre.

No soy capaz de hablarle ni aunque me encierren con él en el ascensor con una amenaza de bomba y sean mis últimos minutos de vida. No puedo intentar ser una conocida, ni una amiga; o es todo o no es nada. Pero no puedo evitar soñar que él es diferente, que él busca lo que yo busco, que aunque él no tenga nada que envidiarle a las estrellas de Hollywood y yo sea una minita común y corriente, nuestras almas estaban destinadas, porque él es TAN… TAN… TAN!!! Y entonces viene la desesperación… le empiezo a jurar a todos mis dioses que si me dan un minuto con él, tan solo un ratito, un besito, un abracito, una nocheeeee… me conformo. Aunque sufra el resto de mi vida después, porque como él no hay nadie, nadie, naad…

No hace falta conocerlo para saber que era inteligente, creativo, talentoso, increíblemente divertido, sensual, e impredecible. Pero lo es. Él es todo eso, y en mis fantasías, el mejor amante. Inevitablemente, tenga contacto o no, sea en mi mente o no, siempre me enamoro de ellos.

Hay dos tipos de hombre Inalcanzable: el que te da bola y el que no te da bola.

Me dirán ustedes que si me da bola entonces es alcanzable, pero están equivocados. La diferencia está solamente en la mente de esta perfectísima criatura, pero repercute ampliamente en nuestra realidad.

El hombre Inalcanzable que no te da bola sabe muy bien quién es, que puede tener a QUIEN QUIERA, y, por supuesto, como es perfecto, siempre tiene a quien quiere, por lo tanto siempre está de novio. Si no lo está, no te preocupes, ya tiene otra en mente. En realidad, el hombre Inalcanzable jamás está disponible. Aunque esté soltero, no tenés chances.

El hombre Inalcanzable que te da bola está transitando la vida todavía sin darse cuenta de quién es. Generalmente son aquellos que de chiquitos y/o adolescentes no tuvieron mucho éxito con las mujeres, y una vez que se empiezan a dar cuenta del poder que tienen sobre ellas, le sacan jugo al máximo a la situación, osea, se las garchan a todas. Sin embargo, aunque te de bola, sigue siendo Inalcanzable. ¿Por qué? Porque podrás conseguir tenerlo por un ratito, pero nunca será del todo TUYO.


El Chico Malo:

Con una sola mirada me doy cuenta. Tienen una chispa en los ojos y emiten una señal invisible que dice “te gusto te gusto te gusto te gusto te gusto”. Se mueven de forma silenciosa hasta que eligen la presa, y comienza el baile. Te van a tener, quieras o no, lo hayas pensado primero o no, te guste cómo son o no. Son simpáticos, graciosos, eternamente solteros y muy persistentes, porque saben que tarde o temprano vas a caer. Típicos histéricos, buitres de todo tamaño y color, caras rotas, rockeros, adictos sexuales, fiesteros, piratas, y muchos etc. No tienen todos los aspectos que tiene el Inalcanzable, ni siquiera tienen la mitad, pero te despiertan el instinto animal de reproducción, y no necesitas más nada que arrancarle la ropa y tirárteles encima como una tigresa en celo. MII IA AAAA AAA AAA UUU UUU U!! Chau dignidad, chau respeto a vos misma, chau orgullo, chau conciencia. No importa nada, la señal es demasiado fuerte, debo tenerlo, debo tenerlo, debo…


Sin embargo, para una mujer inexperta en lidiar con estas calenturas, la perspectiva de lo que una realmente desea se va perdiendo, los besitos van haciendo que se olvide de lo hijo de puta que es, las pocas boludeces que el pibe hace bien las infla… y al final, termina enganchándose como una gila con un tipo que no piensa en otra cosa más que sumar números a la gran colección de minas que pasaron por su cama. Claro que, más tarde te das cuenta que no era amor, si no un capricho/obsesión sin fundamentos… al menos sin fundamentos lógicos, porque que se te caiga la bombacha cada vez que lo ves no sustenta que sea razonable enamorarte de él.


El Bueno:

Es uno de esos que pensamos que no existen, que fueron inventados por Disney, o salieron de algún mito; caballero, amable, respetuoso, interesante conversador, algo inocente, no le gusta salir demasiado, siempre ubicado, expresa sus deseos de estar en una relación seria si todavía no lo está. Si tiene novia, no deja de hablar muy bien de ella ni le molesta demostrar su cariño en público. Pensas que ella tiene toda la suerte del mundo de haberse conseguido uno como él, porque es uno en un millón, y más le vale que no lo lastime porque vas y le arrancas los pelos uno por uno, a la muy desagradecida. El hombre Bueno da ternura, lo querés abrazar y le deseas lo mejor en su vida. Pero lamentablemente, a estos tipos generalmente les falta picardía, o son extremadamente lentos, y terminan convirtiéndose en amistades, o simplemente en hombres que no nos interesan ni de forma sexual y/o romántica. Enamorarse del Bueno es sacarse la lotería… casi imposible, pero pasa.